Novela "El" Capitulo 5 y Final (De nada)

"El"

Capitulo 5 y Final (De nada)

... ¿Qué sucede? estaba desconectado íntegramente de la realidad sin sentir y pensar nada tirado en mi puesto esperando algún acontecimiento que no sucederá jamas, una guerra que nunca tendrá lugar, una ley que ni en mil años sera aceptada, cuando sin aviso alguno siento un tirón en la parte del hombro de mi camisa que me hace recobrar uno a uno los sentidos, el gusto..., el tacto... una fría mesa en mi cara, el olfato... huelo un rico perfume mezclado con el olor de un buen shampoo, la vista... dirijo mi mirada al epicentro del jalón de mi indumentaria y veo una delgada mano que estaba retrayéndose a su punto de origen, el oído...

"Disculpa... esto... quisiera pe-e-edirte ¡si es que puedes solamente! esto, no alcance a a escribir unos párrafos que dicto el profesor y como eres el u-u-unico que queda en la clase si me me me podrías prestar un instante tu cuaderno para poder, ¡Si es que no tienes nada que hacer claro! copiar lo que que me falta."

Una delicada voz de mujer atravesó mis tímpanos sin dejar siquiera tomar conciencia de mis sentidos, lo que me produjo una leve jaqueca. Increíblemente había una chica al lado mio hablándome. Totalmente confundido levanto mi cabeza para averiguar de quien era ese chillido que hizo retumbar mis somnolientas neuronas... No puede ser, no puede ser. Una vez escuche por ahí que si una tostada con mermelada caía desde una mesa siempre caería con la parte de la mermelada mirando el piso, era la ley de no se quien, ¿Giligan?, no importa, el punto es que se puede traducir como "todo aquello que pueda salir mal, saldrá mal" y nunca en toda mi corta vida había estado tan de acuerdo con este principio como lo estoy en este instante... el broche de oro, no es nada mas ni nada menos que "Morticia" la piedra angular de este alocado día sin fin.

Después de percatarme quien era, como un acto reflejo agache de nuevo la cabeza Tratando inútilmente de secar con mi manga los restos de lagrimas de mi mejilla para que no se diera cuenta, y pase a mirarla con mas detención. Estaba roja como una golondrina, pestañeando como un gorrión, nerviosa como un ruiseñor y sedienta de respuesta como un picaflor. temeroso de preguntarle que me había dicho gracias a la verguenculpa, solo atine a recordar vagamente buscando en lo mas recóndito de mi mente su petición, para serles franco solo recordaba el "copiar lo que que me falta" lo cual no me decía absolutamente nada, rayos que hago... armándome de valor tal cual hace 2 días con el nacimiento de mi nombre oficial, para salir luego de esta presión que estaba aumentado mi jaqueca enuncie lo primero que salio.

"Si quieres copiarme en alguna prueba adelante, pero estas demasiado lejos te podrían pillar" lo cual mas que dejarla satisfecha le provoco una risa que mires por donde la mires era adorable, totalmente distinto a las carcajadas malintencionadas de mis compañeros que eran unas certeras puñaladas en mi corazón, su sonrisa en este momento era como si me estuviera pegando con una pluma, que mas que producirme dolor me generaba cosquillas lo que dibujo una sonrisa en mi boca, sin mencionar que el ambiente se relajo completamente volando todos los pajaritos antes mencionados.

"perdona, perdona, es que lo que dijiste me produjo mucha gracia" fue su disculpa. "Escuchaste mal, no quiero copiarte ni nada de eso, solo necesito que me prestes el cuaderno un momento para copiar algo que me falta" con una sonrisa de lado a lado y las manos atrás que ciertamente la hacia ver muy tierna dijo lo anterior, totalmente diferente a la imagen que tuve de ella todo este día. Es increíble que con unas simples palabras, bien tontas ahí que decirlo, su actitud haya cambiado tanto que dio un giro perfecto en 180 grados, tenia una sensación de orgullo infundado pegándome en la nuca.

"¡a no faltaba mas!" con estas palabras di paso a despegarme el cuaderno del brazo que tenia así por el efecto de estar encima de el por x tiempo, causándole una segunda secuencia de risas que me dejo pensando seriamente en convertirme en alguna especie de cómico y finalmente le pase el susodicho cuaderno en sus manos. "¡Muchas gracias! no me tardo espérame un poco" y fue a su asiento con pasos alegres a copiar lo que dificultosamente escribí aguantando mis infantiles lagrimas, lo cual me dio tiempo de por fin descansar del impacto que fue recibir la "visita" de ella. Estire mis brazos y respire hondamente para luego exhalar dándole un merecido respiro a mi alma.

El salón de clases estaría completamente vació si no fuera por nosotros dos, quisiera preguntarle cuanto tiempo hace que termino la jornada escolar que por lo pegado que estaba el cuaderno en mi brazo había sido un buen intervalo de tiempo. Mirando bien por las ventanas debían ser las 17:00 por lo anaranjado que se estaba tornando el cielo lo que era demasiado tarde. ¿Todo este tiempo espero para pedirme el cuaderno? sin mencionar que tuvo que recurrir a darme un tirón para sacarme del trance infinito en el cual estaba sumergido o si no seguramente habría despertado con diamantes en el cielo. ¿por qué? fácilmente podría haber pedido prestado algún cuaderno mañana e irse luego a su casa, sin embargo me espero a mi para poder realizarlo lo cual no tenia sentido para nada... para nada. La mire de reojo con todas estas preguntas en mi cabeza y vi que continuaba copiando elegantemente a muy buena velocidad pero con un detalle que hizo juntar todas las interrogantes y mandarlas por la ventana mas cercana... estaba sonriendo alegremente.

"Gracias" le dije, ella me quedo mirando con una cara de extrañeza sin precedentes mientras su cara se iba tornando de un color rojizo, poco a poco la golondrina regresaba a su ser. "¿gracias por que? yo debería darte las gracias por salvarme con el cuaderno" me contesto al mismo tiempo que seguía apuntando en su cuaderno. "Muchas gracias de verdad" lo dije casi ignorando su anterior pregunta-respuesta, lo que provoco que nos quedáramos mirando el uno al otro durante unos instantes. fue la primera vez en mi vida que me sentía tan tranquilo al mirar a alguien, no buscaba defectos, no trataba de adivinar que piensa de mi, no analizaba nada, nada de nada, simplemente estaba ahí mirando a una personita que sin llegar a buscarlo se transformo en alguien especial. "De nada" explayo, con lo cual dio fin a ese lapso de tiempo que no hablamos nada pero a la vez nos dijimos todo.

Cuando termine de copiar le voy a decir si nos vamos juntos y recomendarle que se ponga coletas que sin lugar a dudas le van a quedar fantásticas. soy capaz de perdonarle las 4 que me debe por verla con ellas.

Capitulo Final 5 Fin




Notas del Autor:

Holas especialmente al único lector que tenga esta obra, o sea mi yo pasado y tal vez alguien de mi familia. Fue un desafió total escribir todo esto pero lo disfrute como nadie. la historia sigue, tal vez en algún tiempo mas la desarrolle que va a tener como protagonista a "ella" donde con su visión continuara el relato del cuento.

¡saludos totales!